Hace unos días, vivimos una nueva situación excepcional y completamente inesperada en nuestro país. El apagón sufrido el pasado lunes 28 de abril supuso una parada total del país, así como en partes de otros compañeros de la Unión Europea.

Las causas y respuestas sobre lo sucedido todavía no acaban de estar del todo claras, pero lo que sí sabemos es que las tiendas de proximidad volvieron a ser claves para la sociedad ofreciendo rápidamente soluciones como linternas, pilas, radios y hornos de gas.

Un segmento del mercado, el del comercio de proximidad, que vuelve a demostrar, como en tiempos de pandemia, que son los grandes referentes y quienes ofrecen la mejor de las ayudas y soluciones a los consumidores ante situaciones excepcionales.

Creo que una vez más las tiendas han estado allí para cobrar en efectivo, para apuntar en papel y fiar las compras, ofreciendo una ayuda clave en un momento de mucho nerviosismo e incertidumbre en la sociedad.

Hay que poner en valor el servicio prestado y el reconocimiento para quienes siempre están ahí, al pie del cañón.

Por Jesús Olaya, director general de Ei Actualidad